El Pueblo: El Escudo
Hace unos años tuve el honor de recibir, por encargo de D. Antonio Padró, alcalde de nuestro pueblo, el placer del diseño y realización de un escudo local, con su bandera, que sirviese para acompañar a la nacional y al pendón de Castilla y León en fiestas y acontecimientos locales, etc.
Tras varios y diversos bocetos, el Ayuntamiento, en sesión plenaria, acepta el original que hoy luce en calles y como logotipo del mismo.
Tras varias consultas a diversos organismos, como Archivo de Simancas, Archivo Diocesano, Archivo de Mombeltrán y otros, confieso que, a pesar de todas estas indagaciones, el resultado fue completamente nulo; así pues, partí de cero para su creación.
Lo dividí en lo que en la jerga heráldica se conoce como escudo partido; en el primer cuartel coloqué, sobre campo de plata, dos gavilanes a su color, superpuestos y siniestrados; la razón de esto es que desde el Libro de Las Monterías a nuestro pueblo se le conoció como «Los Gavilanes», y qué mejor razón para poner en su escudo sus homónimas y emblemáticas aves. En el segundo, cortado: primero, en oro, seis roeles de azur (azul) en filas de a tres (este cuartel es el mismo del escudo del caballero Blasco Ximeno, que allá por el siglo XII repobló nuestro pueblo); y segundo, en azur, una torre en gules (rojo) terrazada de sinople (verde). La explicación a este cuartel es la siguiente: El azul, por el color de nuestro cielo; la torre, en recuerdo del despoblado medieval ubicado dentro de nuestro término y conocido por Las Torres, y, finalmente, el verde, por el color predominante en praderas, bosques y sierras de Gavilanes. El escudo está sumado por una corona ducal en oro (amarillo), en recuerdo del Duque de Alburquerque, señor que fue de nuestro pueblo durante trescientos años.
Con esta somera descripción, creo haber satisfecho vuestra necesaria curiosidad, y si el diseño no fuere del gusto de alguno, desde aquí, como único responsable, le pido disculpas.